Este desayuno no creo que tenga diamantes, pero al menos una dosis de deliciosos macarons está asegurada. Las míticas pastelerías Ladurée en París tienen una cafetería/restaurante/sitio de brunch dentro, y regalar un desayuno o una merienda ahí te hará triunfar seguro. O te lo auto-regalas, que unos macarons y unos auténticos croissants franceses nunca están de más.
¿Desayuno parisino libre de hordas de turistas?
Vale, sí. París es sinónimo de glamour, pero también de multitudes insoportables de turistas. Y es una verdad universalmente reconocida que nadie quiere empezar el día rodeado de colas y de gente.
Por eso, te aconsejo evitar el establecimiento de Ladurée en los Campos Elíseos, y optar por un local menos concurrido como es Ladurée Paris Royale en Madeleine (cerca del Louvre y la Place Vendôme). No hay garantía de ausencia total de turistas, claro está, pero no habrá ni de lejos tanta gente como en los Campos Elíseos. Yo llevé a mi familia ahí en Navidades pre-pandemia y no había ni Dios. Fue una gloria.
🚇 Cómo llegar en metro: estaciones Madeleine (líneas 8, 12 and 14) o Concorde (líneas 1 and 12)
¿Cómo reservar un desayuno en Ladurée Paris Royale?
Puedes hacerlo a través de la conocida página El Tenedor o The Fork. La página oficial de Ladurée Paris Royale contiene toda la info necesaria sobre el menú y los horarios, pero a la hora de hacer la reserva te dirigirá a la página de The Fork.
Hablando de horarios, el establecimiento abre de lunes a viernes de 8 a 19, los sábados de 9 a 19 y los domingos de 10 a 18. O sea que puedes darte este capricho cualquier día de la semana.
Puedes reservar para desayunos, comidas y meriendas. Tienen una carta bastante completa para ir en cualquier momento del día, aunque en mi opinión lo que más gracia tiene y más especial resulta es ir a desayunar. Ahí ya para gustos los colores.

Un poco sobre la experiencia desayunística
Esta experiencia no se cuenta, sino que se saborea. Pero ya que es sabido que comemos en parte por los ojos, dejo un par de fotos para que se te abra el apetito y quieras desayunar en Ladurée en tu próximo viaje a París.
Empiezo por la decoración del sitio. Ya he puesto una foto del escaparate arriba, puedes ver que es precioso en Navidad, y el resto del año no será para menos. El interior está decorado en el mismo estilo para que vivas una experiencia 100% parisina por un momento. Todo muy elegante, con toques muy vintage y mucha madera en plan «salón de té de época».

Pedimos cada uno un café y unos macarons surtidos para compartir. Todo tiene unos detalles muy cuidados y estaba riquísimo.
También tienen platos salados por si te apetecen unos huevos revueltos o algo por el estilo, y los escaparates estaban a rebosar de pastelillos y tartas que son puras bombas de azúcar a la vez que una preciosidad para mirar (y fotografiar).



Espero que hayas disfrutado de este desayuno virtual, es algo que volveré a hacer cuando vuelva a París, tengo muy buen recuerdo de este momento en la ciudad de las luces. ¡Cuéntame qué tal fue tu experiencia si también lo has hecho? ¿Tuviste tanta suerte como nosotros con la ausencia de multitudes?